¿La piel es un material sostenible?
Sí. En la actualidad, el impacto en su fabricación es muy bajo debido a los importantes controles ambientales existentes, como por ejemplo el re-aprovechamiento de las aguas residuales. Ademas, debido a la alta resistencia y durabilidad del cuero, se generan mucho menos residuos en comparación, por ejemplo, con productos sintéticos equivalentes.
Y por último, y no menos importante, si los restos que generan las industrias cárnicas no se aprovechasen para la fabricación del cuero, se produciría un sobrante ingente de pieles de la alimentación que directamente serían residuos.
Según la asociación Leather Naturally, la fabricación moderna de cuero recicla alrededor de 270 millones de pieles de vaca al año, o sea alrededor de 7,3 millones de toneladas, que de otro modo se procedería a su eliminación, lo que sería mucho más contaminante que el curtido.